"No
olvidemos que su obra es autobiográfica, siendo ella (o a
veces
sus amigos) el personaje que deambula generalmente en sus cuadros".
Beatriz Varo sobrina de la artista.
Remedios
Varo, La flama, óleo
/ masonite, 100 x 68 cm. 1961
Remedios Varo, Mujer
saliendo del Psicoanalista, óleo / tela, 71 x 41 cm. 1961
"A principio
de los años sesenta Remedios le escribía al Dr. Alberca
acerca de sus sueños, pesadillas y terrores, también
de su extrema sensibilidad, timidez y sentido de culpabilidad. Este
aspecto de su vida lo plasma en Mujer saliendo del Psicoanalista.
Remedios se burla de sus propios problemas y después de haber
decidido dejar atrás el pasado, tira al pozo los desechos psicológicos,
recuerdos de antaño. El canasto lleva estos residuos, contiene
el reloj: tiempo. Ha cortado los hilos que la atan..., aquí,
por primera vez, Remedios no aparece ligada a algo atada, los hilos
están cortados, ha recuperado su libertad. La cabeza que tira
al pozo, que dice ser la de su padre puede no ser exactamente esto,
su padre había muerto hacía muchos años. Es más
bien la idea que representa, la autoridad."
Beatriz
Varo en su libro: Remedios Varo: en el centro del microcosmos.
p.129